Valve ha dado un paso importante en la monitorización de rendimiento con la nueva actualización beta del Cliente de Steam, lanzada el pasado 17 de junio.
Steam actualiza sus herramientas de monitorización de rendimiento
Esta versión transforma el tradicional contador de FPS en una suite completa de análisis en tiempo real, directamente desde la aplicación de Steam.
Ahora, los jugadores pueden visualizar no solo la velocidad de fotogramas, sino también información crucial como el uso de CPU, GPU y la disponibilidad de memoria, por lo que no necesitaríamos de un contador de terceros, lo que ayuda a hacer más sencillo la monitorización directamente desde el cliente de Steam.
Una de las características más destacadas es la capacidad de distinguir entre fotogramas reales y generados por tecnologías como DLSS. Esta función resulta clave en un contexto donde la generación de fotogramas puede inflar artificialmente los FPS percibidos, afectando el diagnóstico de posibles cuellos de botella.
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Gracias a esta implementación, los usuarios pueden detectar si su GPU está saturada, observando el estado de la VRAM, o si el procesador está al límite. Esto permite tomar decisiones informadas para ajustar la configuración gráfica y obtener un rendimiento óptimo. Además, Steam muestra el valor real de FPS junto con los Frame Generation, lo que lo hace más útil.
De momento, esta funcionalidad está disponible exclusivamente para quienes formen parte de la versión beta del cliente. No obstante, se espera que esta poderosa herramienta llegue pronto a todos los usuarios en la versión estable del cliente, aunque no sabemos exactamente cuándo va a suceder.
De esta manera, Valve continúa así reforzando su compromiso con mejorar su cliente y ofrecer una experiencia más completa para los jugadores de PC. Os mantendremos al tanto de todas las novedades.
